Las flores de Bach utilizadas para la depresión, actúan armonizando los estados psíquicos y emocionales de esta enfermedad, reduciendo el padecimiento y los síntomas, en especial el de la tristeza, la pérdida de interés por todo, la falta de autoestima y el derrumbamiento.
Las flores de Bach base para la depresión son:
Mustard, para la tristeza y el llanto. Gorse, para la desesperanza. Gentian, para el desaliento. Larch, para los pensamientos de inutilidad.
Pine, para los pensamientos de culpa. Sweet Chestnut, para la desesperación y la angustia profunda. Cherry Plum, para las ideas suicidas.
La depresión es una enfermedad o trastorno de los más antiguos que existen. Su significado es hundimiento moral, abatimiento, derribado.
La depresión se divide en varios niveles por la intensidad de sus síntomas y la gravedad de ellos. No es igual estar triste y abatido sin ganas de no hacer nada, que tener ideas de suicidio y pasarse todo el día llorando.
Por otro lado también se suele dividir en dos tipos la que se conoce su causa y la que no se encuentra un desencadenante para ese estado.
En principio es mas fácil en el primer caso llegar a atajarla antes que en el segundo, ya que en el segundo no aparece en principio una causa o un foco como detonante de este trastorno.
En estos casos se conoce el origen de la enfermedad y dependiendo de la persona seria en principio mas facíl de tratar ya que hay una causa conocida que es el detonante de este trastorno.
En el primer caso se tratarían los síntomas que presentara el paciente y a la vez la causa que le llevó a la depresión. ( Ya que es conocida )
Y en el segundo se tratarían igualmente los síntomas y en la medida que se produzca la mejoría, emergerán otros estados emocionales y de conducta que no se habían visto al principio del tratamiento con las flores de Bach,
Por lo tanto habría que cambiar la formula para tratar aquello que estaba más escondido.
Y así sucesivamente, hasta que aparezca el origen que desencadenó la depresión.
La vida significa crecimiento y desarrollo, cuando se satisfacen nuestros impulsos y necesidades, sentimos la alegría de vivir.
Estos pueden ser el deseo de un amor, el contacto humano, una vocación etc.
La alegría de vivir es una de las características esenciales de toda la creación. Pero nacidos en un mundo en el que se nos impone multitud de barreras a nuestro impulso vital de desarrollo solemos estar en un permanente conflicto entre cumplir o incumplir nuestros deseos y anhelos.
Siempre que el impulso de desarrollo se lleve a cabo enfrentándose o aceptando la situación o el obstáculo que nos limita, nuestra vida tendrá un sentido.
Pero si no se consigue o no nos encaramos hacia ese obstáculo, por regla general nos deprimiremos.
Nos privamos entonces de nuestra alegría de vivir, es decir, de nuestra satisfacción, de nuestras necesidades interiores. Da igual las que sean, sus sentimientos, su sexualidad, su vocación, etc.
En el primer caso se tratarían los síntomas que presentara el paciente y a la vez la causa que le llevó a la depresión. ( Ya que es conocida )
Y en el segundo se tratarían igualmente los síntomas y en la medida que se produzca la mejoría, emergerán otros estados emocionales y de conducta que no se habían visto al principio del tratamiento con las flores de Bach,
Por lo tanto habría que cambiar la formula para tratar aquello que estaba más escondido.
Y así sucesivamente, hasta la curación del paciente.
Aquí tres TRASTORNOS parecidos que NO son una DEPRESION MAYOR
Pinche en los remedios; en las letras verdes que están en Ingles y así sabrá que hace cada remedio. Posiblemente se vea Usted reflejado en ellos.
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